M. Butterfly by David CronenbergWarner Bros
M. BUTTERFLY DE DAVID CRONENBERG
La Dramaturgia de la Vida y el Amor desde la Perspectiva de un Maestro de lo Bizarro después del Genio del Horror
David Cardona
"La ópera, ese arte excesivo, espurio y sintético comparte con el cine
la capacidad de llamar a todos los sentidos, de sumirlos en un mundo
cuyas reglas de juego se aceptan desde un principio y en las cuales
uno está dispuesto a ver más allá de las apariencias,
a crearse una realidad toda propia y fascinante.".
la capacidad de llamar a todos los sentidos, de sumirlos en un mundo
cuyas reglas de juego se aceptan desde un principio y en las cuales
uno está dispuesto a ver más allá de las apariencias,
a crearse una realidad toda propia y fascinante.".
Luis Alberto Álvarez
1977.
Las disposiciones creativas y los campos de interés de un realizador suelen prevalecer como referentes durante un cierto tiempo, pues es la vertiente creativa la que deriva en la observación y estructuración de una obra cinematográfica determinada, producto de un modo de interactuar con los actores y de mantener una estructura tridimensional de las situaciones. David Cronenberg ha sido un verdadero ícono de un cine de horror
con una particular trayectoria por cuanto su labor se ha caracterizado por la independencia y un modo de hacer las cosas que se soporta en el trabajo aplicado y el uso de recursos personales y profesionales que no siempre dependen de los grandes estudios aún cuando esto último se pudiera esperar del género de las películas en donde lo horrendo y lo macabro configuran personajes y universos bizarros tal y como lo ha sido en sus orígenes la obra de este director canadiense. Los principios técnicos y los referentes literarios y artísticos de Cronenberg siguen presentes en su obra y sus más característicos temas siguen infundiendo de contenido sus producciones en cuanto estética y labor, como ha sido el caso de M. Butterfly y sus más recientes trabajos, los que apartados ya del género que constituyó sus orígenes y en el cual alcanzó el nivel de referente estético, siguen conservando su impronta personal.
Nacido en 1943 en Ontario, Canadá, Cronenberg ha sido considerado uno de los más grandes directores de la nueva generación del cine de horror. La exploración acerca de temas como el terror biológico y el horror sexual hicieron de sus trabajos un novedoso acercamiento a los miedos y compulsiones de un público que supo reconocer en él su talento y capacidad creativa. Sin embargo sus últimos trabajos derivan en la exploración del género y el carácter antes que los arquetipos de un cine tipo gore o bizarro fundamentado en efectos especiales, denotando un manejo interesante de lo que siempre le ha caracterizado: la elección y manejo de actores apropiados para roles importantes y la tridimensionalidad de las situaciones haciendo uso del recurso de lo arquitectónico y espacial.
Hijo de un periodista y una pianista profesional, se graduó de la Universidad de Toronto en Literatura Inglesa y habiendo incursionado en la realización de sketches, realiza en 1966 Transfer y From the Drain y en 1969, Stereo, seguida de Crimes of the Future (1970). Shivers en 1975, coproducida con Ivan Reitman, trata sobre las obsesiones sexuales en un contexto de horror y peligro generado por un parásito que desata un deseo sexual incontrolable. Desarrollando el mismo tema, Rabid (1977), con la actuación de la actriz porno Marilyn Chambers, quien no llegaría a consolidarse en Hollywood debido a la saga que le precedía, se erigiría en otro referente en el que el personaje central desarrolla un apetito vampírico por la sangre debido a una afección particular. De cierta manera, la obra de Cronenberg alude a una transformación de los efectos de la medicina y los padecimientos antes que al fracaso de la ciencia o aleatoriedad, pues nuevos modos de vida son generados y asumidos por sus personajes de un modo generalmente bizarro. Con The Brood (1979), otro trabajo relacionado con el terror biológico, el director recurre a Oliver Reed y Samantha Eggar, haciendo uso por primera vez de actores establecidos en la industria y obteniendo reconocimiento en el género.
En 1981, su película Scanners y con Videodrome y The Dead Zone (ambas de 1983), adaptación de la novela de Stephen King, su primera película sobre un guión no personal, obtiene definitivamente la figuración y renombre en el género, consolidando así una mirada que ya había dejado evidenciada en trabajos para seriados de la televisión tales como Programme X y Peep Show desde los años setenta. El remake de un clásico de grandes y pequeños como lo fue The Fly en 1986, en el que la estructura atómica de un científico se confunde por accidente con la de una mosca fue asumida por muchos como una metáfora sobre el Sida (Mónaco, 1991, p. 137) y posteriormente Dead Ringers (1988), adaptación de la novela Twins de Bari Wood y Jack Geasland exige de la doble actuación de Jeremy Irons todo el talento que cimentaría un agudo tratamiento de la sexualidad masculina y del control patriarcal de la profesión médica (Ídem). De cierta manera, la saga de esta primera etapa concluye con esta película que dará cuenta al igual que sus anteriores, de una crítica de los miedos y la represión que irónica y aparentemente fundamenta una sociedad supuestamente liberal. Consecuente con ello, Naked Lunch (1991), adaptación de El Almuerzo Desnudo de William Burroughs se erigiría de cierta manera en un tributo a uno de sus referentes literarios que junto con Vladimir Nabokov, ocupan un lugar preminente en sus afectos.
Es con M. Butterfly, película que seguiría a su trabajo como actor en Nightbreed (1990) que Cronenberg alude a una nueva narrativa en la que las situaciones adquieren un dramatismo por la fuerza del carácter y la peculiaridad de unas situaciones que derivan de un contexto dramatúrgico profundamente emotivo en el que confluyen lo literario y lo realístico a la par con lo histórico. Transcurre el año de 1964 en Beijing y para Europa y Norteamérica son variados y complejos los hechos que contextualizan el universo común de los personajes centrales. La caída de Nikita Kruschev y la elección de Leonid Brezhnev y Alexei Koshigin en los círculos de poder de la Unión Soviética a la par con la guerra de Vietnam, representan algunos hechos de la realidad política del momento. Así mismo en el mes de enero, Francia y China anuncian la intención de establecer relaciones comerciales y un mes después sería reconocida por la primera, la República Popular China acarreando el rompimiento de las relaciones de Francia con Taiwán.
Mientras los Estados Unidos recurrían generalmente a Francia como intermediario diplomático para adelantar relaciones con China, René Galimard, diplomático francés y Song Liling cantante, entablan una relación teniendo como fondo la ópera de Giacomo Puccini, Madame Butterfly, por la cual se conocen y que se constituye en el escenario primero por el cual la historia derivará en un drama personal que parece recrear el tema central de la pieza operática. La película se establece como una evolución de la pieza de Henry David Wang del mismo nombre (1988) presentada en el Eugene O`Neil Teatre de Broadway desde el 20 de marzo de 1989 hasta el 27 de enero de 1990 en 777 ocasiones, y que trata sobre el drama y relación del diplomático francés Bernard Boursicot y Shi Pei Pu, cantante de la Ópera de Pekin.
Los colores e iluminación así como los escenarios urbanos y arquitectónicos son especialmente selectos y los movimientos de cámara característicos aún siendo sutiles, son algunos de los elementos que complementan la actuación de Jeremy Irons y de John Lone en una obra que desde la puesta en escena y dramaturgia comunica el valor y arrojo personal que es capaz de desplegar un hombre frente a una relación que involucra y determina trágicamente el destino de los amantes y de la historia política de sus naciones por sobre las convenciones y los valores a los que se deben los personajes.
Controversial pero estéticamente defendible, esta obra de David Cronenberg exhibe todo el talento del que es capaz el director, el mismo que suele hacer uso de elementos y recursos disponibles y exhibir un discurso personal y estético relativamente independiente. Su fascinación por lo mórbido y lo macabro en un género generalmente asociado a lo comercial, así como la incondicional lealtad a sus colaboradores le caracterizan como un director particular. Así, su hermana Denise llevaría a cabo el desarrollo de los vestuarios para The Fly y The Naked Lunch y Howard Shore ha compuesto la música de sus películas a la par con Peter Suschitsky, quien se ha encargado de la fotografía en las mismas. Del mismo modo, su cercanía con Canadá y su modo de trabajo, que gracias a los apoyos financieros de Telefilm Canada ha podido establecer, dan cuenta de un discurso explícito en pro de las cinematografías nacionales y la necesidad de un papel activo del Estado para desarrollarlas como tales La personalidad y estilo de David Cronenberg ha dado cuenta de una evolución tan particular como brillante después de esta película que se erige en el trabajo que da apertura a una nueva saga de intereses temáticos y de autor que hoy le caracterizan como realizador notable.
Hijo de un periodista y una pianista profesional, se graduó de la Universidad de Toronto en Literatura Inglesa y habiendo incursionado en la realización de sketches, realiza en 1966 Transfer y From the Drain y en 1969, Stereo, seguida de Crimes of the Future (1970). Shivers en 1975, coproducida con Ivan Reitman, trata sobre las obsesiones sexuales en un contexto de horror y peligro generado por un parásito que desata un deseo sexual incontrolable. Desarrollando el mismo tema, Rabid (1977), con la actuación de la actriz porno Marilyn Chambers, quien no llegaría a consolidarse en Hollywood debido a la saga que le precedía, se erigiría en otro referente en el que el personaje central desarrolla un apetito vampírico por la sangre debido a una afección particular. De cierta manera, la obra de Cronenberg alude a una transformación de los efectos de la medicina y los padecimientos antes que al fracaso de la ciencia o aleatoriedad, pues nuevos modos de vida son generados y asumidos por sus personajes de un modo generalmente bizarro. Con The Brood (1979), otro trabajo relacionado con el terror biológico, el director recurre a Oliver Reed y Samantha Eggar, haciendo uso por primera vez de actores establecidos en la industria y obteniendo reconocimiento en el género.
En 1981, su película Scanners y con Videodrome y The Dead Zone (ambas de 1983), adaptación de la novela de Stephen King, su primera película sobre un guión no personal, obtiene definitivamente la figuración y renombre en el género, consolidando así una mirada que ya había dejado evidenciada en trabajos para seriados de la televisión tales como Programme X y Peep Show desde los años setenta. El remake de un clásico de grandes y pequeños como lo fue The Fly en 1986, en el que la estructura atómica de un científico se confunde por accidente con la de una mosca fue asumida por muchos como una metáfora sobre el Sida (Mónaco, 1991, p. 137) y posteriormente Dead Ringers (1988), adaptación de la novela Twins de Bari Wood y Jack Geasland exige de la doble actuación de Jeremy Irons todo el talento que cimentaría un agudo tratamiento de la sexualidad masculina y del control patriarcal de la profesión médica (Ídem). De cierta manera, la saga de esta primera etapa concluye con esta película que dará cuenta al igual que sus anteriores, de una crítica de los miedos y la represión que irónica y aparentemente fundamenta una sociedad supuestamente liberal. Consecuente con ello, Naked Lunch (1991), adaptación de El Almuerzo Desnudo de William Burroughs se erigiría de cierta manera en un tributo a uno de sus referentes literarios que junto con Vladimir Nabokov, ocupan un lugar preminente en sus afectos.
Es con M. Butterfly, película que seguiría a su trabajo como actor en Nightbreed (1990) que Cronenberg alude a una nueva narrativa en la que las situaciones adquieren un dramatismo por la fuerza del carácter y la peculiaridad de unas situaciones que derivan de un contexto dramatúrgico profundamente emotivo en el que confluyen lo literario y lo realístico a la par con lo histórico. Transcurre el año de 1964 en Beijing y para Europa y Norteamérica son variados y complejos los hechos que contextualizan el universo común de los personajes centrales. La caída de Nikita Kruschev y la elección de Leonid Brezhnev y Alexei Koshigin en los círculos de poder de la Unión Soviética a la par con la guerra de Vietnam, representan algunos hechos de la realidad política del momento. Así mismo en el mes de enero, Francia y China anuncian la intención de establecer relaciones comerciales y un mes después sería reconocida por la primera, la República Popular China acarreando el rompimiento de las relaciones de Francia con Taiwán.
Mientras los Estados Unidos recurrían generalmente a Francia como intermediario diplomático para adelantar relaciones con China, René Galimard, diplomático francés y Song Liling cantante, entablan una relación teniendo como fondo la ópera de Giacomo Puccini, Madame Butterfly, por la cual se conocen y que se constituye en el escenario primero por el cual la historia derivará en un drama personal que parece recrear el tema central de la pieza operática. La película se establece como una evolución de la pieza de Henry David Wang del mismo nombre (1988) presentada en el Eugene O`Neil Teatre de Broadway desde el 20 de marzo de 1989 hasta el 27 de enero de 1990 en 777 ocasiones, y que trata sobre el drama y relación del diplomático francés Bernard Boursicot y Shi Pei Pu, cantante de la Ópera de Pekin.
Los colores e iluminación así como los escenarios urbanos y arquitectónicos son especialmente selectos y los movimientos de cámara característicos aún siendo sutiles, son algunos de los elementos que complementan la actuación de Jeremy Irons y de John Lone en una obra que desde la puesta en escena y dramaturgia comunica el valor y arrojo personal que es capaz de desplegar un hombre frente a una relación que involucra y determina trágicamente el destino de los amantes y de la historia política de sus naciones por sobre las convenciones y los valores a los que se deben los personajes.
Controversial pero estéticamente defendible, esta obra de David Cronenberg exhibe todo el talento del que es capaz el director, el mismo que suele hacer uso de elementos y recursos disponibles y exhibir un discurso personal y estético relativamente independiente. Su fascinación por lo mórbido y lo macabro en un género generalmente asociado a lo comercial, así como la incondicional lealtad a sus colaboradores le caracterizan como un director particular. Así, su hermana Denise llevaría a cabo el desarrollo de los vestuarios para The Fly y The Naked Lunch y Howard Shore ha compuesto la música de sus películas a la par con Peter Suschitsky, quien se ha encargado de la fotografía en las mismas. Del mismo modo, su cercanía con Canadá y su modo de trabajo, que gracias a los apoyos financieros de Telefilm Canada ha podido establecer, dan cuenta de un discurso explícito en pro de las cinematografías nacionales y la necesidad de un papel activo del Estado para desarrollarlas como tales La personalidad y estilo de David Cronenberg ha dado cuenta de una evolución tan particular como brillante después de esta película que se erige en el trabajo que da apertura a una nueva saga de intereses temáticos y de autor que hoy le caracterizan como realizador notable.
david cardona © 2008
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
ÁLVAREZ, Luis Alberto. “Tan lejos tan cerca de Win Wenders. Wenders sin Ángel”. Páginas de Cine, Volumen 3. 1ª ed. Medellín, Universidad de Antioquia. p. 306 - 312. 1998.
_._._._._._._._._._._._._._._._._._._._._._._._._._._._._._._._._._. Luis Alberto Álvarez decía:
"El cine ha sido comparado a todas las artes... a la pintura, a la sinfonía, a la arquitectura y hasta a la escultura. Cuentos! si hay algo a lo que el cine se parezca es a la experiencia operática. La ópera, ese arte excesivo, espurio y sintético comparte con el cine la capacidad de llamar a todos los sentidos, de sumirlos en un mundo cuyas reglas de juego se aceptan desde un principio y en las cuales uno está dispuesto a ver más allá de las apariencias, a crearse una realidad toda propia y fascinante. En la ópera uno acepta que Carmiña Gallo, entrada en carnes, sea la Violeta que está muriendo de tuberculosis o la frágil Butterfly de 15 años... "quindici netti netti"...
; acepta el incomprensible nudo argumental del Trovatore o un duelo acompañado de un do de pecho del tenor, que el barítono enemigo respeta sin entrar a atacar. Más de la mitad de de las grandes obras de la historia del cine son óperas, melodramas... lo son Alexander Nevski e Iván el Terrible de Eisenstein, El nacimiento de una nación e Intolerancia de Griffith... operático es El ciudadano Kane y La Pasión de Juana de Arco... y operáticas son las obras de Bergman, Fellini, Visconti (sobre todo Visconti y Bertolucci). Óperas como Il Trovatore y La Flauta Mágica son lugares de citas continuas en el cine y no se diga Richard Wagner cuya música de la "muerto por amor" de Tristan e Isolda ha acompañado toda clase de rituales cinematográficos a partir de L`Age D`Or de Buñuel, en los comienzos mismos del sonoro. El cine como vehículo portador de toda clase de impresiones es el arte que más de acerca a la concepción Wagneriana del Gesamtkunstwerk", la utópica "obra de arte total" ".
Referencia Bibliográfica:
._._._._._._._._._._._._._._._._._._._._._._._._._._._._._._._._._._._._._._._._._._._._._._._._._._._.
Vínculos relacionados:
David Cronemberg from Wikipedia.org -The free encyclopedia-
M. Butterfly -Play- from Wikipedia.org -The free encyclopedia-
M. Butterfly -Film- from Wikipedia.org -The free encyclopedia-
M. Butterfly -Music Video-
Maria Callas Madame Butterfly "Tu Tu Piccolo Iddio"
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Websites Relacionados:
Universidad Nacional de Colombia Sede Medellín
Biblioteca Pública Piloto - De Medellín para Latinoamérica -
Centro Colombo Americano -Medellín-
Universidad de Antioquia
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Misioneros Claretianos -Biblioteca Provincial-
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Corporación Creemos
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Advertencia:
Los contenidos publicados en este Blog parten de una iniciativa libre e independiente como tributo a la memoria de Luis Alberto Álvarez (1945-1996), crítico y realizador colombiano, amigo, mentor y maestro y a su labor en la Facultad de Ciencias Humanas y Económicas de la Universidad Nacional de Colombia sede Medellín. Las opiniones expresadas por los autores de los mismos son de su expresa responsabilidad y no comprometen a las instituciones relacionadas. Se preservan todos los derechos de los materiales usados y citados en este sitio y se espera un trato equivalente para con los mismos. Se aspira así, a contribuir a la difusión de una cultura fundamentada y objetiva de la apreciación, crítica, historia y realización del cine, en especial para las y los jóvenes de la ciudad de Medellín, Colombia y las audiencias globales que con respeto y atinencia a los derechos y garantías que corresponden a los contenidos digitales de conformidad con las normas y regulaciones internacionales, deseen hacer uso de los mismos.
Cordialmente,
David Cardona
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